Archivos diarios: 31 octubre, 2014
Alegato a un periodista que me reclama objetividad
Alfonso Porres
Hace un par de días, un amigo periodista me recriminaba de alguna manera la forma “panfletera” en que le planteaba lo que está sucediendo en San Juan Sacatepéquez. Me imagino que me llamaba “panfletero” porque reproducía las palabras que las comunidades usan en sus reclamos: “gobierno corrupto”, “vende patrias”, “explotadores” y demás perlas.
De alguna manera me reclamaba mi falta de inmersión e investigación sobre los acontecimientos, como base para hacer un periodismo objetivo. En realidad, mi “mala formación” viene de la antropología, una herramienta que relativiza la moralidad cristiana, la forma en que se genera el pensamiento, las culturas, las leyes, las instituciones, los sistemas políticos, económicos y hasta el mismo “periodismo objetivo”.
La antropología puede ser una herramienta que cuestione la objetividad y la manera en que una persona genera la información: con sesgo cultural, con sesgos temporales, con interpretaciones individuales y ligadas a una línea editorial de un grupo de interés específico.
Por otro lado, cuando me planteó lo objetivo de la investigación y la necesidad de profundidad, pensé en qué validez pueden tener estos elementos ¿Será que descubrir las modalidades de la miseria humana necesita de herramientas de constatación, de materiales escritos, de pruebas gráficas? ¿En función de qué y para qué se necesita ese material? ¿Habrá con ello un cambio en la humanidad, en los movimientos sociales? ¿Habrá menos guerras, menos muertos? ¿Menos manipulación mediática?
Traigo esto a colación porque pareciera que el periodismo objetivo sí generaría un cambio en el pensamiento humano.
Lo cotidiano de este país, con mi percepción panfletera de las cosas, me dicta que no se puede esperar que unos políticos corruptos que se hacen diputados, hagan leyes ecuánimes y sabias; ni que esas leyes hechas por unos corruptos sean la justificación de un estado de derecho chueco. Unos jueces bastante limitaditos hacen cumplir leyes de políticos corruptos que a la vez hacen leyes malas para encarcelar a personas en centros de detención manejados por mafias
De qué hablamos, ¿de que hay que hilar fino? ¿para encontrar qué? si esta sociedad es tan burda que se resbala en su propio vomito todos los días.