Por Nelton Rivera –Prensa Comunitaria.
Comunidades Maya Kaqchikel y comunidades mestizas del municipio de Chuarrancho en la zona central del país, luchan de forma pacífica por el agua, especialmente por el afluente del río Motagua, los pueblos se organizaron frente al acoso de empresarios que buscan instalarse de forma violenta.
Llegar a Chuarrancho es toda una travesía, de contar este municipio con una carretera asfaltada o pavimentada posiblemente el viaje duraría 40 minutos, la corrupción de las administraciones de los gobiernos municipales y el abandono del Estado se reflejan fácilmente en la carretera de terracerría que hace imposible desplazarse fácilmente de la capital hacia el municipio.
El Miércoles 6 de noviembre 2013, las comunidades Kaqchikeles realizaron una concentración en el campo de futbol, en una instalación bastante grande, varios cientos de personas participaron. Además las comunidades del pueblo mestizo acompañaron la concentración. Mujeres y hombres, niños, jóvenes y adultos mayores estuvieron presentes mientras varios lideres y lideresas dieron un informe sobre los últimos logros y avances de su lucha.
Uno de los objetivos de esta concentración fue informar al pueblo sobre la recuperación de una parte de las tierras comunales que históricamente les pertenece, este fue uno de los puntos principales junto a la lucha contra el proyecto Hidroeléctrico “El Sisimite” propiedad del ingeniero Álvaro Aguilar Prado. El tercer punto abordado en la asamblea fue la exigencia que llevaron las comunidades recientemente al Congreso de la Republica para exigir fondos para la re construcción de la carretera.
Autoridades ancestrales, representantes de la cofradía, lideres y lideresas comunitarias realizaron una nueva asamblea, la marimba estuvo presente acompañando la tarde, finalizando con un baile de las mujeres de la cofradía para cerrar el festejo por los logros alcanzados.
“Todo el pueblo de Chuarrancho, todo el pueblo lo que debemos de hacer es defender nuestra dignidad, para que haya paz en nuestro municipio. Debemos de hacer de verdad la unidad, encontrar la unidad del ser humano de las y los hermanos que vivimos en nuestro pueblo. Esta es una lucha pacífica, que hemos tenido durante mucho tiempo, hoy buscamos la justicia en esta Guatemala.” Abigaíl Monroy, lideresa Kaqchikel.
Nuestra lucha
“Como pueblo de Chuarrancho hemos sufrido, nos discriminaron las grandes empresas, las grandes instituciones, nos quieren despojar de nuestro territorio, nos quieren quitar nuestros recursos naturales y nuestra comunidad indígena de Chuarrancho hemos mantenido la armonía y la unión para poder luchar y defender nuestros derechos.
El pueblo maya de Guatemala ha sufrido desde hace mas de 500 años, siempre los marginados y los discriminados es el pueblo maya, nos otros tenemos muchos valores, el respeto el amor hacia la madre naturaleza, a nuestra tierra. Nosotros como pueblo de Chuarrancho, junto a la autoridad ancestral, junto a la cofradías, por mas de 100 años ha existido la cofradía y ellos son los encargados de mantener la cultura de Chuarrancho.
También están las Nanas, las señoras que son parte del consejo de ancianos y ancianas, el Consejo de Ancianos que son luchadores que siempre han llevado la autoridad indígena de Chuarrancho.
Queremos denunciar las injusticias que se han hecho en nuestro municipio, pero también a nivel de Guatemala, sufrimos del conflicto armado interno, por mas de 36 años, lo sufrimos como pueblo Maya, últimamente el gobierno central, esta en contra de nuestras comunidades, comunidades organizadas. Porque, por los intereses económicos, ha permitido las licencias mineras a otros países, para que ellos sean beneficiados con las hidroeléctricas, la minería y el pueblo no quiere quedarse sin tierra ni recursos naturales.
El pueblo de Chuarrancho ha sufrido, el 25 de junio del 2001 el Registro de la Propiedad despojo a todos los vecinos de su tierra, hablamos de más de 15 mil personas, el Registro General junto con la Municipalidad de Chuarrancho hicieron acuerdos para poder despojar a las comunidades de sus tierras. En el 2009 también otra comunidad, la comunidad de San Buena Ventura, también el gobierno y las empresas quieren quitarnos el Río Motagua, que es una de los ríos más grades de Guatemala, pero nosotros estamos en lucha, queremos mantener la paz, queremos la armonía de nuestra comunidad.
Nosotros vamos a mantener siempre en unión, en armonía y en paz. En nombre del pueblo de Chuarrancho, en nombre de la comunidad indígena queremos que escuche el mundo las injusticias que se están viviendo en Guatemala.” Santos Alvarado, presidente de la Asociación de la Comunidad Indígena de Chuarrancho.
Recuperación de las tierras Comunales
En Guatemala muy poco se habla de la lucha por la recuperación de las tierras comunales de los pueblos, el pueblo Kaqchikel de Chuarrancho realizó una fuerte lucha legal para recuperar parte de las tierras que forman su territorio ancestral, aun faltan tierras pero su lucha continua.
Fue durante el gobierno dictatorial del general Justo Rufino Barrios en el siglo XIX, en el año de 1877 Barrios aprobó el decreto 170 relativo a la Redención en Terrenos cedidos por contrato enfiléutico[1], lo que provoco que terratenientes del municipio como Miguel Klee desde San Raymundo reclamara las tierras comunales de Chuarrancho como tierras baldías. Fue hasta 1897 luego de un litigio que fueron devueltas las tierras comunales el 2 de julio de ese año, fue otorgado el titulo de propiedad sobre 81 caballerías, con 21 manzanas y 704 varas cuadradas de tierra comunal. De esa manera fue inscrita como Finca número 339, del departamento de Guatemala el 2 de octubre de 1897.[2]
Las comunidades Kaqchikeles no estuvieron solas en este litigio, el caso fue acompañado por COMKADES, a través del componente de Justicia del programa Maya, fue precisamente el 17 de octubre del año 2012 que se ganó definitivamente el litigio a favor de la Comunidad indígena de Chuarrancho.[3]
Desde el año 2012 la Sala Tercera de la Corte de Apelaciones del ramo civil y mercantil ordenó al Registro de la Propiedad la titulación de la tierra, en este caso devolverla como tierra comunal a favor de las comunidades Kaqchikeles. Contrario a este mandato de la Corte, las comunidades fueron notificadas en noviembre del 2013, finalmente el Registro de la Propiedad accede a realizar la titulación.
“se ha ordenadó a la Registradora de la Propiedad que restituya la finca 339 a nombre de la Comunidad Indígena Vecinos de la Aldea Chuarrancho. Con esto la comunidad recuperaría el título de su territorio ancestral. Por medio del otorgamiento del amparo, se suspenden las inscripciones anómalas que realizó el Registro de la Propiedad sobre este territorio; actualmente este caso se encuentra pendiente de resolver en definitiva, debido al recurso de apelación interpuesto por la alcaldía municipal de Chuarrancho, a favor de quien se había inscrito anómalamente la finca en cuestión.”[4]
Empresas que atentan contra la vida: La Cementera y las areneras
Al pasar por Chinautla rumbo a Chuarrancho los principales cerros testimonian la destrucción acelerada que la empresa Cementos Progreso provoca, desapareciendo grandes cantidades de montaña para extraer de la tierra materiales que servirán para la comercialización de cemento, material selecto, arena entre otros. Además Cementros Progreso pretende construir una carretera exclusiva que le servira para conectar la Planta «San Gabirel» en San Juan Sacatepéquez con las carreteras para que su producción sea transportada, esta carretera que autodenominaron «Anillo Regional» pasaría por el municipio de Chuarrancho. Otra problemática en el municipio es la maquinaria instalada en el centro del río “Las Vacas”, extrayendo arena.
Para José Cruz del Colectivo Madre Selva hay otro problema en este territorio, la familia Castillo, dueña de la Cervecería y la empresa Agua Salvavidas, están tratando de comprar grandes extensiones de montaña especialmente en donde se capta la mayor cantidad de agua, recurso que alimenta los manantiales de donde se abastecen sus empresas, mismo recurso vital para las comunidades del área quienes verían completamente afectados por la falta del agua, especialmente en las épocas de calor.
Chuarrancho se encuentra rodeado por los afluentes de dos grandes ríos; por el sur el Río “Las Vacas” que fue convertido en desagüe, empujando en sus aguas los deshechos que provienen de la ciudad capital y dejando en todo su recorrido grandes cantidades de plástico a las orillas de su afluente. Por el norte es rodeado por el Río “Motagua” que abastece del vital liquido a todas las comunidades del municipio, alimentan varios ecosistemas y protege cientos de especias de animales, flora y fauna en su gigantesco recorrido hasta llegar al Caribe.
Las voces de las mujeres en lucha y resistencia
En la concentración estuvo presente Yolanda Oquelí lideresa representantes de la Resistencia pacífica en “La Puya”, quienes luchan contra la extracción minera en San José del Golfo y San Pedro Ayampuc, actualmente esta siendo criminalizada por los intereses de la empresa EXMINGUA y la empresa Kappes Kassiday & Associates KCA de los EEUU. Otra de las lideresas que estuvieron presentes es Margarita Ramos representante de la Comunidad CPR (Comunidad de Población en Resistencia) 31 de Mayo en Ixcán Quiche, ella al igual de miles de comunitarios de la CPR son sobrevivientes de la represión del Estado de Guatemala durante la guerra y ahora defiende el territorio de empresas Hidroeléctricas, mineras, entre otras. Las dos lideresas compartieron su pensar y sentir con las y los comunitarios presentes, como una forma de fortalecer los lazos de lucha y resistencia entre los pueblos.
Yolanda Oqueli lideresa de la Resistencia Pacífica “La Puya”
“Guatemala un país hermoso, un país en donde hay gente buena, gente que esta luchando por la paz, sabemos que habemos muchos y muchas guatemaltecas, en su mayoría, que luchamos por la paz, pero que no es fácil.
Somos invadidos por gente que viene a despojarnos de nuestro territorio, lamentamos decir que siendo defensores y defensoras de la paz, defensores por una vida digna para nuestros hijos e hijas, hemos sido victimas de la violencia, fuimos reprimidos, somos gente que ha sido criminalizada por el simple hecho de decir que estamos exigiendo nuestra igualdad de condiciones.
Lamentablemente en nuestro país cuesta creer en la paz, cuando el mismo gobierno viola nuestros derechos, hemos tenido en la resistencia contra la minería esa experiencia, nos hemos reunido con el presidente y no hemos visto voluntad política, ni la mas mínima intención de tener paz en este país.
Por eso es importante escuchar la verdadera realidad de Guatemala, para denunciar al mundo que los pueblos queremos paz.”
Margarita Ramos, lideresa comunitaria CPR “La Unión” 31 de Mayo
“Represento a la CPR Comunidades de Población en Resistencia, que resistimos 15 años en la montaña durante el conflicto armado, a pesar de eso no nos hemos hecho para atrás, al contrario hemos alzado la voz, gracias a organizaciones como Madre Selva, Ukux Be quienes nos han apoyado tenesmo al experiencia de cómo administrar nuestros bienes naturales.
En la Comunidad Unión 31 de Mayo, tenemos una hidroeléctrica comunitaria, ya a funcionado por mas de un año y la misma comunidad la esta administrando. Se puede entonces, hago la invitación pueblo Maya a que defendamos nuestros recursos, manifestar nuestros derechos, alzar nuestra voz y que no nos dejemos, que sigamos un paso adelante.”
[1] Chuarrancho, conociendo la historia, costumbres y tradiciones. Junio 2011.
[2] Ibidem.
[3] Informe Anual Consolidado de Actividades del “Programa Maya – para el pleno ejercicio de los derechos de los pueblos indígenas de Guatemala”. Periodo 1 de enero – 31 Diciembre 2012.
[4] Ibidem.